El equipo de "hombres-pájaro" formado por
los deportistas Toni López, Santi Corella y Alvaro Bultó, tras su éxito
al haber sobrevolado el Estrecho de Gibraltar con sus novedosos trajes de
alas, han culminado la extraordinaria aventura consistente en sobrevolar
el Polo Sur.
Ningún deportista había intentado realizarlo
anteriormente y el único equipo de paracaidistas que se aventuró vió como
tres de sus miembros perdían la vida dadas las bajísimas temperaturas que
existen a esa altura en la
Antártida y que pueden alcanzar durante el vuelo hasta
sesenta grados bajo cero (-60ºC),
siendo -30ºC
la temperatura normal un día bueno en aquel lugar.
El éxito del proyecto, denominado "Proyecto
Alas", ha sido fruto de tres años de dura preparación, y de la
colaboración de los ejércitos de España y Argentina, cuya base está
implantada en Marambio (Antártida).
Dentro del programa de preparación llevado a cabo,
Alvaro Bultó realizó previamente la prueba de esfuerzo en la cámara
climática de CCI, sometiéndose a las severas condiciones térmicas
existentes en la altitud de lanzamiento, durante el tiempo de duración de
vuelo humano, con el fin de estudiar su comportamiento fisiológico en
dichas condiciones extremas.
Gracias a la cámara climática de CCI se pudo
estudiar "a priori" el límite de resistencia humana en tales
condiciones extremas.
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