China, el país más contaminante del mundo, ha sido este año el anfitrión
del Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebró ayer y que Naciones
Unidas dedica este año a la lucha contra la contaminación del aire.
Pero
la contaminación no conoce fronteras nacionales: según datos de la
Organización Mundial de la Salud, 9 de cada 10 personas en el mundo no
respiran aire saludable y, en España, cada año mueren cerca de 40.000
personas por este motivo. Nos enfrentamos a una crisis de salud pública:
casos de neumonía infantil, bronquiolitis y crisis asmáticas se disparan
en presencia de estas partículas microscópicas que se consideran
sustancias cancerígenas de primer orden.
Sabemos que la quema de carbón es la principal fuente de contaminación
atmosférica en todo el mundo y las emisiones ligadas al transporte están
creciendo más rápidamente que cualquier otra fuente. En ciudades como
Madrid y Barcelona año tras año se superan los máximos legales de
emisiones nocivas ligadas al tráfico, un incumplimiento que perjudica
especialmente a la población más vulnerable como menores, tercera edad o
personas con enfermedades respiratorias.
Además, las fuentes de contaminación que más afectan a nuestra salud son
también las responsables del cambio climático. España es uno de los
países que más va a sufrir sus peores consecuencias, en forma de olas de
calor, sequías, pérdida de especies o fenómenos meteorológicos extremos.
Desde
Greenpeace se trabaja activamente en la lucha contra el cambio climático
y por mejorar la calidad del aire, y reclamamos al gobierno de España
que triplique la ambición climática y ponga fecha de cierre del carbón y
la venta de coches de combustión antes de 2030. ¡Únete a Greenpeace!
Fuente:
Greenpeace
www.cci-calidad.com |